ANTIGUA

La Conquista de Nubia durante el reinado de Senusret III

,  

Senusret III (Sesostris III)

Descendiente de Senusret II y de Ueret, gobernó Egipto durante un largo periodo de tiempo, su vida se orienta entre los años 1878 y 1843 a.C. Aunque estas fechas varían según las fuentes. Su gobierno sufrió un cambio con respecto al de sus antecesores, siendo estos más pacíficos que el mandato de Senusret III. Podemos decir que fue uno de los reinados más “conocidos” del Reino Medio, ya que las hazañas de este monarca llegaron a oídos de Heródoto, que relató sus expediciones exagerando en ocasiones la realidad.
A Senusret III se le ha otorgado la reorganización y la sustitución del sistema de nomarcas debido a la descentralización que producía, recuperando autonomía en el propio faraón y disminuyendo el poder que ejercieron estos jefes locales. Sin embargo, no existen pruebas reales que sostengan tal cambio político durante su reinado, las tumbas de estos jefes locales nos indican ostentación y poder económico. Esto no concuerda con lo que las fuentes aseguran con respecto al control de las provincias. Hoy en día se sigue debatiendo si su gobierno duró en torno a 30 años, o duró menos tiempo, ya que las fuentes clásicas se contradicen.
Este faraón ordenó construir una pirámide en Dashur, la obra finalizó con una construcción de adobe de 60 metros de altura, con revestimiento de bloques de caliza. Aunque no fue enterrado en este emplazamiento, parece ser que decidió ser enterrado en Abydos.

La política exterior de Senusret III

Los historiadores clásicos como contemporáneos se han centrado en estudiar la política exterior egipcia tanto con los asiáticos “aamu” en territorios de Siria y Palestina, como con los nubios en la frontera sur del país. La expedición hacia el este fue de una envergadura superior a la que cualquier egipcio de la época podía imaginar, llegando dicha expedición hasta Sekmem. No se conoce el porqué de esta campaña, sus descendientes no realizarán este tipo de expediciones militares en Asia.
 Y es precisamente durante el reinado de Senusret III, cuando se vuelven a emprender las campañas en la Baja Nubia como habían realizado sus antecesores. Estas acciones militares se pueden explicar de forma que elementos del sur, fuesen introduciéndose a través de las fronteras egipcias durante años, hasta la reacción del faraón Senusret III[1]. Se han contabilizado cuatro campañas reflejadas en las fuentes durante los años: sexto, octavo, décimo y dieciseisavo de su gobierno. Se ha hablado de un sometimiento al pueblo nubio, pero esto no tiene porqué ser exactamente así pues recordemos que parte del ejército egipcio lo formaban nubios.
Lo cierto es que para defender y cerrar la frontera Nubia se erigieron ocho fortificaciones que se extendían hasta la garganta de Semnah. Estas fortificaciones militares de extraordinaria construcción tenían otras funciones a parte de las de vigilar las 24 horas del día. En la fortaleza de Semma encontramos una estela que muestra un mensaje de advertencia hacia los nubios:
“Límite meridional hecho en el año 8…para prevenir que cualquier nubio pase río abajo o por tierra o en barco, (también) cualquier grupo de nubios, quitando cualquier nubio que venga a negociar a Iken o cualquier buen negocio que se pueda hacer con Esta inscripción claramente quiere infundir temor sobre el enemigo, pero también nos proporciona información diferente. Esta estela explica que si se permite traspasar la frontera a cualquier nubio que tenga intención de comerciar en Iken. Esta fortaleza denominada Iken acabó siendo un mercado como han mostrado las fuentes arqueológicas, por lo tanto, estas fortificaciones a parte de la función defensiva y militar acabaron adoptando más funciones, sedentarizándose con el paso del tiempo.
En el quinto despacho de Semma se explica como un grupo de nubios fueron a solicitar trabajar “para servir al palacio”, si bien los egipcios los rechazaron, les dieron alimento y bebida para el camino de regreso[3]. Esta fuente nos hace conocer una faceta de la realidad en la que no se cometía un control tan excesivo con la población nubia.
Otra fortaleza de suma importancia resultó ser Buhen, construida en ladrillo y tallada en parte en la roca, fue una fuerte de 9 metros de altura con unos impresionantes Esta inscripción claramente quiere infundir temor sobre el enemigo, pero también nos proporciona información diferente. Esta estela explica que si se permite traspasar la frontera a cualquier nubio que tenga intención de comerciar en Iken. Esta fortaleza denominada Iken acabó siendo un mercado como han mostrado las fuentes arqueológicas, por lo tanto, estas fortificaciones a parte de la función defensiva y militar acabaron adoptando más funciones, sedentarizándose con el paso del tiempo.
En el quinto despacho de Semma se explica como un grupo de nubios fueron a solicitar trabajar “para servir al palacio”, si bien los egipcios los rechazaron, les dieron alimento y bebida para el camino de regreso[3]. Esta fuente nos hace conocer una faceta de la realidad en la que no se cometía un control tan excesivo con la población nubia.
Otra fortaleza de suma importancia resultó ser Buhen, construida en ladrillo y tallada en parte en la roca, fue una fuerte de 9 metros de altura con unos impresionantes muros.muros.ellos.[2]”Esta inscripción claramente quiere infundir temor sobre el enemigo, pero también nos proporciona información diferente. Esta estela explica que si se permite traspasar la frontera a cualquier nubio que tenga intención de comerciar en Iken. Esta fortaleza denominada Iken acabó siendo un mercado como han mostrado las fuentes arqueológicas, por lo tanto, estas fortificaciones a parte de la función defensiva y militar acabaron adoptando más funciones, sedentarizándose con el paso del tiempo.
En el quinto despacho de Semma se explica como un grupo de nubios fueron a solicitar trabajar “para servir al palacio”, si bien los egipcios los rechazaron, les dieron alimento y bebida para el camino de regreso[3]. Esta fuente nos hace conocer una faceta de la realidad en la que no se cometía un control tan excesivo con la población nubia.
Otra fortaleza de suma importancia resultó ser Buhen, construida en ladrillo y tallada en 
Por último, mencionaremos la fortificación de Mirgissa, localizada en la región sur de la segunda catarata. Se extendía a través de la orilla del Nilo con unos imponentes muros de 10 metros de altura, en esta fortificación se han encontrado pruebas de comercio entre nubios y egipcios.
Frente a la propaganda faraónica que pretendía mostrar al nubio como un pueblo cobarde y temeroso o débil, las fuentes nos demuestran lo contrario. Eran un pueblo que comerciaba con los egipcios, tanto unos como otros dependían de ese comercio, formaban parte de las filas del ejército egipcio, y trabajaban en palacio para ellos[4]. En el ejército eran denominados “medjais” actuaban como exploradores del desierto, ya que eran conocedores de la zona, y operaban bien como fuerza de choque[5]. Toda esta información ha llegado a nosotros a través de lo que se conoce como los “despachos de Semma”. Son una serie de informes que detallaban las necesidades de las fortalezas y avisaban de cualquier peligro al poder central localizado en Tebas durante la dinastía XIII.
Los relatos de las campañas de Senusret III en Nubia parecen reflejar una serie de conflictos brutales en los que se mataba a los varones nubios y se esclavizaba a la población, además de arrasar sus cosechas y viviendas[6]. Lo cierto como las fuentes atestiguan es que con el paso de los años las fortalezas se fueron sedentarizando tras los descendientes de Senusret III y la posterior dinastía.parte en la roca, fue una fuerte 
Las fronteras no eran tan rígidas como los mensajes de las estelas de Semma y Uronarti atestiguan, más bien eran permeables y necesarias para obtener materias primas y mano de obra. Los diecinueve años de gobierno de Senusret III fueron muy complejos políticamente, ya que supuso un cambio en el Antiguo Egipto que ha seducido a historiadores a investigar sus acciones y este periodo.
de 9 metros de altura con unos impresionantes muros.



 Las fronteras no eran tan rígidas como los mensajes de las estelas de Semma y Uronarti atestiguan, más bien eran permeables y necesarias para obtener materias primas y mano de obra. Los diecinueve años de gobierno de Senusret III fueron muy complejos políticamente, ya que supuso un cambio en el Antiguo Egipto que ha seducido a historiadores a investigar sus acciones y este periodo.
Autor: Víctor Vicente García para revistadehistoria.es
Bibliografía:

  • ALONSO GARCÍA, José F. Los hombres del faraón: el ejército a finales del Reino Nuevo en el Antiguo Egipto. Bilbao, Universidad de Deusto, 2009.
  • DIEGO ESPINEL, Andrés. “El Reino Medio.” En: PARRA ORTÍZ, J. M (coord.) El Antiguo Egipto, economía, sociedad y política. Marcial Pons, 2009.
  • GRIMAL, Nicolás. Historia del Antiguo Egipto. Madrid, Akal, 2004.
  • PADRÓ PARCERISA, Josep. MARCHESI, Álvaro y COLL, César. Historia del Egipto faraónico. Madrid, Alianza Editorial, 2014.
  • PADRÓ PARCERISA, Josep. Historia del Antiguo Egipto. Barcelona, Alianza Editorial, 1999.
  • SANTÍS PERÓN, Daniel. “Egipto, el Reino Medio.” En: Historia 16. Nº 331, 2003. Pp. 35-60.
  • SHAW, Ian. Historia del Antiguo Egipto. Madrid, Oxford University Press, 2010.
  • TABLAS NIETO, J. “La interacción entre Egipcios y Nubios a finales del Reino Medio: del Topos a la vida cotidiana.” En: El futuro del Pasado: revista electrónica de historia. Nº 2, 2011. Pp. 117-130.
[1] PADRÓ, J. Y MARCHESI, A. (2014). Pp- 185.
[2] SANTÍS PERÓN, D. (2003). PP- 54.
[3] TABLAS NIETO, J. (2011).
[4] Íbidem (2011).
[5] ALONSO GARCÍA, J. (2009).
[6] SHAW, Ian. (2010).
https://revistadehistoria.es/la-conquista-de-nubia-durante-el-reinado-de-senusret-iii/?utm_source=MadMimi&utm_medium=email&utm_content=La+conquista+de+Nubia&utm_campaign=20180112_m143593380_La+conquista+de+Nubia&utm_term=La+Conquista+de+Nubia+durante+el+reinado+de+Senusret+III