Explican el misterio de vida y muerte de la Puerta del Infierno en Heriapolis, Turquía.
By Anastasia Gubin - La Gran Época.
Durante siglos la gruta debajo del templo de Plutón en la ciudad gregoromana Hierapolis, Turquia, atrajo miles de turistas. La leyenda decía que ahi se encontraba la antigua Puerta del monstruo Hades o “Puerta del Infierno”.
“Se decía que era tan mortal que mataba a todos los animales que entraban en su proximidad, sin dañar a los sacerdotes castrados que los dirigían”, destaca un estudio que analizó los gases de hoy y de como era el nivel de gases de la época en que se escribieron los relatos.
“Este espacio está lleno de un vapor tan brumoso y denso que apenas se puede ver el suelo. Cualquier animal que entre se encuentra con la muerte instantánea. Lancé gorriones y de inmediato respiraron y se cayeron“, escribió el historiador griego Estrabón cuando visitó el lugar. El vivió entre los siglos 64 a.C., y 24 d.C. También Plinio habló de esta maligna puerta.
Estrabón señaló que los eunucos, gracias a sus cualidades podían introducir sus cabezas, y permanecían inmunes.
Ahora los científicos liderados por Hardy Planz, de la Universidad alemana Duisburg Essen, creen entender porque la nube concentrada de dióxido de carbono a algunos los mataba y a otros no. Ellos publicaron un estudio el 12 de febrero.
La siguiente imagen muestra lo que queda de la construcción que se realizó sobre la gruta de la cual emanaban los letales gases.
Foto: Puerta del Infierno hoy en en Heriapolis (Ilustración de Francisco D’Adria U Salento)
Su nueva investigación demostró que aún hoy en día los niveles de CO2 de la gruta son altos. En la gruta debajo del templo de Plutón, se encontró que el CO2 estaba en concentraciones letales de hasta 91%. Ahí no llega ni el Sol ni el viento.
“Sorprendentemente, estos vapores aún se emiten en concentraciones que hoy en día matan insectos, pájaros y mamíferos”.
En cambio las concentraciones que escapan de la boca de la gruta, donde supuestamente se hacían las ceremonias religiosas, son variables, en un rango de 4 a 53% de CO2,, dependiendo de la altura sobre el nivel del suelo. Además los niveles suben por la noche “matando fácilmente incluso a un ser humano en un minuto”.
El gas se disipa gran parte por el Sol durante el día, pero es más mortal al amanecer después de la noche de acumulación.
En la puerta, descubrieron que hay una altura donde el mortal CO2 es más concentrado, y seguramente los sacerdotes hace 2000 años lo sabían. Los investigadores llaman esta parte “el lago”. Tiene un nivel letal sobre el 50% CO2. En cambio a 10 cm de altura es de un 35 por ciento, y por encima de 40 centímetros, la concentración disminuye rápidamente.
Un toro podía estar parado dentro del lago de gas con su boca y las fosas nasales a una altura entre 60 y 90 cm, con los sacerdotes también parados ahí, cuidando que su nariz y boca estén muy por encima del nivel tóxico, escribió el equipo en su artículo.
Cuando los animales bajaban la cabeza a la altura de 40 centímetros morían.
Foto: reconstrucción de la Puerta del Infierno que daba a una gruta letal (Massimo Limoncelli)
Hoy se sabe que Heriapolis y el templo Plutón está construido sobre una falla sísmica, conocida como Babadag. Es por eso que de ahí, desde “los infiernos”, es decir desde bajo la corteza terrestre, brota el gas mortal.
“Hace dos mil años, solo las fuerzas sobrenaturales podían explicar estos fenómenos desde las profundidades de Hades, mientras que hoy en día las técnicas modernas sugieren que se trata de un fenómeno conocido como desgasificación de CO2 geológico que tiene componentes del manto con concentraciones de helio y radón relativamente más altas”.
Estas emisiones para los antiguos reflejaban el aliento de Cerberos, un monstruo de tres cabezas y cola de serpiente, que cuidaba la entrada del infierno gobernado por Hades. En la mitología Cerberos fue destruido por Hércules (Héracles para los griegos).
Foto: Cerberos ( Wikimedia)
“Al menos en el caso de Hierápolis, escritores antiguos como Estrabón o Plinio describieron un fenómeno místico muy exactamente sin mucha exageración”, explicó Planz.
La gruta y Puerta del Infierno data de 2.200 años. Su cueva fue redescubierta por arqueólogos de la Universidad de Salento, Italia hace siete años.
“Tremendamente excitante”, describió Gil Renberg el descubrimiento de Planz, según La Historia Viva. El científico de la Universidad de Nebraska Lincold, destaca que esto valida las fuentes de los antiguos historiadores, además hace pensar que las otras puertas del infierno, funcionen de la misma manera. Entre ellas una llamada Akaraka, también en Turquía.
Según el arqueólogo italiano Francesco D’Adria, lo que aún no se explica es que en la puerta se encontraron lámparas de aceite, que podría hacer pensar que algunos entraban pese a que los gases eran letales. ¿Cómo lo hacían?.
https://www.lagranepoca.com/ciencia-y-tecnologia/descubrimientos/262540-explican-el-misterio-de-vida-y-muerte-de-la-puerta-del-infierno-en-turquia.html
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