La Ciudad de La Vega Modelo de Arquitectura Republicana que Desaparece.

La actual ciudad de La Vega fundada por los sobrevivientes de La Concepción, antigua fundación española, obra del Descubridor y Conquistador Cristóbal Colón, que desapareciera en 1562 a consecuencia de un devastador movimiento telúrico que azotó toda las regiones Central y Norte de la isla, cambiando así el rumbo de aquellos históricos acontecimientos que se iniciaron a partir de la epopeya del descubrimiento
Informaciones de diferentes épocas dan cuenta de que la ciudad actual, segunda de las fundaciones correspondientes a La Vega, levantada alrededor de un antigua ermita dedicada al culto de San Sebastián, que estuviera situada al otro lada del Río de donde estuviera la ciudad de la Concepción, no llegara a adquirir la importancia estrategia ni el valor arquitectónico y urbanístico de aquella


El profesor Erwin W. Palm en su obra “Los Monumentos Arquitectónicos de la Española” dice sobre esta situación lo siguiente: “ La ciudad que fines del siglo XV prometía tanto que el testamento apócrifo de Cristóbal Colón pudo presumir la voluntad del Descubridor de grabar en mármol la memoria de su gran empresa precisamente en la iglesia de La Concepción de La Vega, en 1528, en definitiva tiene fortaleza e iglesia de piedra y un Monasterio de San Francisco de Piedra e casa de Cabildo y otros veinticinco edificios de piedra muy bueno…… no hay agora (ahora) veinte vecinos. La Vida se ha retirado de la ciudad. A Las Casas le parece soñar cuando, con el bullicio de los años pasados aún en la retina, contempla ahora La Vega Real abandonada

El escritor norteamericano Samuel Hazard en su extraordinaria obra “ Santo Domingo, su pasado y presente”, publicada en la ciudad de New York en 1873, y reeditada en 1974 por la Sociedad Dominicana de Bibliófilos, en la que refería a nuestra isla la conceptúa como “ victima del infortunio”, refiere de La Vega entre otras cosas lo siguiente: “ Esta constituida de manera ordenada; las calles se cruzan en ángulo recto, y en el centro de la ciudad se halla la acostumbrada plaza, cerca de la cual está el único edificio de importancia en el lugar, la iglesia. Las casas son generalmente de madera, aunque son mucho mejor que la mayoría de las demás ciudades, siendo algunas de ellas de una solidez muy respetable…”
Es a finales del siglo XIX, que se transforma definitivamente la ciudad de La Vega. Es durante el llamado período del romanticismo que la histórica ciudad del Camú se transforma de lo que prácticamente podría considerase una sencilla comunidad en una ciudad con características definidas, dotada de manzanas rectangulares, como apunta Hazard, y bien proporcionadas, parque con glorietas y una diversidad de edificaciones entre3 la que se encuentran las primeras construidas de mampostería, hasta entonces inexistentes en la ciudad.

La comunicación con el puesto de Sánchez, abierta por el ferrocarril en el año de 1886 pone a La Vega en contacto con los estilos arquitectónicos europeos, así como con los patrones de construcción de aquellos tiempos, tantos del viejo mundo como de Norteamérica, permitiendo además la oportunidad de conocer y ponerse en contacto con los nuevos materiales que procedían de ambos lugares
Con la llegada de varias empresas extranjeras a la región, y la afluencia de materiales industrializados al mercado local, como madera procesada, acero, cemento, planchas lisas y acanaladas de zinc para cubiertas y otros más, por la cual se desarrolla una actividad constructora similar a las de otras ciudades importantes de la República.


Al igual que en otras ciudades del país los veganos se apoderaron de otros estilos arquitectónicos de aquellos momentos, tales como el Art. Nouveau, Art. Deco, El Pradera, este último proveniente de las llanuras del Medio-Oeste de los Estados Unidos donde el gran maestro Frank Lloyd Whight, uno de los padres de la arquitectura contemporáneo fuera su líder, y el estilo Bungalow, que floreciera junto al Pradera en los comienzos del siglo XX
La radicación en La Vega a principio del siglo XX del arquitecto Italiano Alfredo J. Scaroina contribuyó de manera notable al mejoramiento del perfil urbanístico de la ciudad. Entre sus principales obras estuvo la del Mercado de La Vega, demolido penosamente y sustituido por una inhóspita plaza.
Similar a lo sucedido a todas las demás ciudades dl país, el progreso, en su más funesta expresión , continua haciendo estragos en la mayoría de las edificaciones que dieron identidad y categoría a la ciudad Olímpica, dándole paso a una serie de nuevas edificaciones que, a diferencia de las sustituidas, carecen de estilo arquitectónico alguno, y más bien constituyen, a darle a esa esta ciudad el sello de uniformidad e impersonalidad que caracteriza a todas las demás ciudades importantes de la República

La Vega está llamada a jugar un papel estelar en el desarrollo económico de nuestro país. Esperamos que todos los veganos, vinculado al progreso, no solo en el orden económico sino en el social y cultural, se ponga a tono con el clamor nacional, contribuyendo, por un lado al rescate de la antigua Concepción y por otro a la revalorización de la zona antigua de la ciudad , de forma que junta a todas las demás ciudades importantes de la República Dominicana reciba la admiración y el respecto de cuantos la visiten
Fuente, consultada.
Manuel del Monte Urraca, colección Vega Vieja, Vol.III, pps 15al 20
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