Valentiniano III. Emperador de Occidente (419-455).

Emperador romano de Occidente (425-455 d.C.) cuyo nombre completo era el de Flavio Placino Valentiniano. Hijo de Constancio III y Gala Placidia, nació el 2 de julio del 419 en Rávena. En el año 420 fue nombrado nobilissimus a manos de su tío, el emperador Honorio. La buena relación existente entre Valentiniano y Honorio llegó a su fin a principios del 423, momento en el que la emperatriz Placidia cayó en desgracia en la corte imperial, que le forzó al exilio a la corte oriental de Teodosio II. A la muerte de Honorio, Teodosio II planeó la reunificación del Imperio en su persona, pero el Senado romano se opuso y en el 423 nombró emperador de occidente a un alto funcionario (primicerius notariorum) llamado Juan. Teodosio II, ante la certeza de que no sería aceptado en occidente, nombró césar a Valentiniano y le facilitó tropas con las que poder acudir a Rávena para deponer a Juan. Fue en aquel mismo año cuando se selló el compromiso matrimonial entre Valentiniano y Licinia Eudoxia, hija de Teodosio II, boda que no tendría lugar hasta el año 437.

Mientras Gala Placidia y Valentiniano se encaminaban hacia Rávena, Bonifacio, comes Africae, cortaba el suministro de trigo a Italia y forzaba la rendición de Juan. Éste, vencido y torturado, murió en mayo del 425. El 23 de octubre del 425 Valentiniano fue proclamado emperador de occidente en la misma Roma. Gala Placidia, quien había sido designada augusta, se aseguró la regencia durante la minoría de edad de su hijo. Valentiniano III, cruel y despótico, aunque de carácter débil, estuvo totalmente controlado por los designios de su madre, quien ejercía las verdaderas riendas del gobierno. La autoridad de la emperatriz estuvo sin embargo limitada por la acción de tres generales: Bonifacio, quien había contribuido a la caída de Juan; Félix, general bizantino nombrado magister utriusque militiae y, sobre todo, el patricio Aecio, verdadero hombre de Estado de la corte de Valentiniano III.

Aecio mantuvo una política de acercamiento con los pueblos bárbaros, a los que conocía bien debido al hecho de que había pasado su infancia entre los hunos de Atila. La situación de occidente era desesperada: la mayor parte de Hispania se encontraba en manos de los suevos; Britania había sido abandonada definitivamente por las legiones romanas en el año 407 y se encontraba a merced de sajones, pictos y escotos; en el Illyrico campaban los hunos; África acabó por perderse a manos del vándalo Genserico; y en la Galia se trataba de controlar a godos, francos salios, burgundios, alanos, así como a los grupos de Bagaudas. En nombre de Valentiniano III Aecio firmó pactos con los francos salios (428) y burgundios (440), a los que asentó como federados en el territorio imperial. Sin embargo, uno de los principales acontecimientos producidos durante el reinado de Valentiniano III fue el enfrentamiento contra los hunos de Atila. En el 445, Atila cruzó el Danubio llamado por Honoria, hermana de Valentiniano III. Honoria, unida al chambelán de palacio Eugenio, cayó en desgracia tras la ejecución de éste en el 449.

En venganza llamó a Atila, a quien envió su anillo. El huno esgrimió este hecho para reclamar la Galia como parte de la dote matrimonial. Valentiniano III no sólo rechazó los planes de boda, sino que organizó un gran ejército que frenara su avance. Atila demostró pronto que la dote era una excusa, ya que avanzó sobre Galia sin pisar Italia, donde aguardaba la supuesta prometida. Las tropas imperiales fueron dirigidas por Aecio y el visigodo Teodorico I, quienes vencieron a los hunos en la batalla de los Campos Catalaúnicos en el 451. Valentiniano, celoso de los éxitos de su general, trató de recuperar las riendas del gobierno acusando a Aecio de la mala situación económica y política. Tras una conspiración instigada por el propio emperador, Aecio fue asesinado el 21 de septiembre del 454. Sin embargo, la muerte de Aecio trajo consigo la ruptura de muchos pactos con los pueblos bárbaros: los merovingios avanzaron hacia el Somme, mientras que los sajones saqueaban las costas atlánticas.

Al mismo tiempo, la nobleza romana y una gran parte de las tropas, todavía fieles a Aecio, conspiraban contra Valentiniano. La revuelta estalló el 16 de marzo del 455 y acabó con la muerte del emperador en el Campus Martius a manos de los bárbaros Optila y Tharausila, bucelarios de Aecio. La muerte de Valentiniano III marcó el fin de la dinastía Teodosiana y el inicio de los reinos bárbaros. Desde el 455 dio comienzo en occidente un período de breves gobiernos de emperadores llamados clarísimos o títeres, tanto por la falta de legitimidad dinástica como por el control que ejercieron sobre ellos los jefes del ejército.

Bibliografía

• BROWN, P. The world of late Antiquity: from Marcus Aurelius to Muhamed. (London; Thames & Hudson, 1971).
• MAIER, F.G. Las transformaciones del mundo mediterráneo, s III-VIII. (Madrid; Siglo XXI, 1972).
• TEJA, R. La época de los Valentinianos y de Teodosio. (Madrid; Akal, 1990).

Tomado de La Fuente;http://www.mcnbiografias.com/app-bio/do/show?key=valentiniano-iii-emperador-de-occidente